En nuestro país hay mucho talento que cada año trabaja para llevar el nombre de México muy en alto. Los mexicanos que transcienden en diferentes ámbitos no solo destacan por su talento, también por como enfrentan retos y superaran obstáculos; cada uno tiene una historia de la cual podemos aprender algo como es el caso de la corredora mexicana de fondo y ultra fondo perteneciente a la etnia tarahumara o rarámuri.

Que a continuación, te presentamos su historia:

María Lorena Ramírez Hernández nació el 1 de enero de 1995 y ha residido habitualmente en la localidad Ciénaga de Noragachi, en el municipio de Guachochi, y a la fecha vive con su hermano en Rejocochi. Cuida el ganado de su familia y también sigue practicando su deporte, ella pertenece a una comunidad indígena mexicana conocida históricamente por su resistencia y por sus especiales dotes para correr a larga distancia; de hecho, el término rarámuri significa “pies ligeros”.

Su hermano, su padre y su abuelo también han sido corredores.

María Lorena Ramírez Hernández, jamás imaginó convertirse en una corredora internacional; sin embargo, una inesperada victoria la catapultó a incursionar, más allá de su amada tierra, en esta carrera de la vida que está dispuesta a ganar.

La carrera que la puso en el mapa fue la UltraTrail Cerro Rojo en su edición del 29 de abril de 2017, ahí quedó en primer lugar en la carrera, celebrada en Puebla, en la que participaron 500 atletas de 12 países.

Gano esta competencia tras siete horas y tres minutos de carrera, esta prueba la realizo en condiciones poco habituales entre los demás deportistas de esta disciplina. La indumentaria que utilizo fue una falda, una camiseta y unas sandalias.

La imagen de esta sobe saliente deportista tarahumara en el podio junto a la segunda y tercera clasificada se hizo viral, ya que en desde los primeros instantes de su publicación, dicha imagen se compartido por más de 50.000 veces en Facebook en sus primeros minutos.

Cabe destacar que además de su indumentaria atípica, ella no utilizo ningún equipamiento deportivo como: chaleco de hidratación, licras y mangas de compresión, dispositivos que utilizan los más experimentados corredores.

María ha comentado en varias entrevistas que no tienen un entrenamiento formal, que su único “entrenamiento” se basa en el recorrido de entre 10 y 15 kilómetros que hace diario para cuidar su ganado. Para mantenerse hidratados, los corredores tarahumaras consumen pinole, un polvo de maíz con agua que además es parte de su dieta básica.

Su primera carrera fuera del país (el CajaMar Tenerife Bluetrail) la corrió en Europa, exactamente el 10 de junio del 2017, en la isla canaria de Tenerife (España), a donde había sido invitada directamente por la organización.​ Sin embargo, en esta prueba tuvo que retirarse por un fuerte dolor de rodilla cuando ya había completado más de la mitad de los casi 100 km de recorrido.​ En el 2018, Lorena volvió a participar en la Tenerife Bluetrail, finalizó en el tercer lugar de la categoría Sénior, Esta hazaña le costó el reconocimiento internacional como “la Rarámuri que conquistó Tenerife”, sorprendió al mundo participando en una competencia de 102 kilómetros en la isla española.​

Fue la quinta mejor mujer y ocupó el lugar 110 en Overall, en el ultra maratón. ​

Siempre que le es posible, prefiere correr con sandalias y con la ropa tradicional de su comunidad e incluso ha rechazado las ofertas comerciales de importantes marcas para que vista o calce su material deportivo. ​

María no habla español, únicamente al igual que su hermana, solo lo entiende, al no haber tenido la oportunidad de acceder a una educación continua no aprendió a hablarlo correctamente. Su hermano mayor funge como traductor, este hecho confirma la existencia de la desigualdad que vive una gran parte de las mujeres indígenas al no recibir una educación básica, apremiando en estas comunidades a los hijos del género masculino, mientras que ellas son rezagadas a las labores domésticas.

María ha logrado sobresalir a pesar de los retos a los que ha sea enfrentado y esto le ha valido varios reconocimientos, entre ellos fue la portada de la revista Vogue, México en octubre de 2019, edición de aniversario, cabe decir que la revista es especializada en entrevistar celebridades.

En la entrevista que le otorgo a la revista Vogue, cuando fue la portada de dicha publicación declaro:

“Me gusta ser una mujer rarámuri, me gusta tener esta cultura, estas tierras que estoy pisando, donde he crecido, es un lugar muy bello. Tenemos de todo, tenemos árboles, tenemos muchas cosas aquí en el estado de Chihuahua. Me siento muy feliz de lo que tengo”

La felicidad parece ser una idea subjetiva en su entorno que, a pesar del ambiente inhóspito la esperanza cobra diversas formas de expresión que se convierten en memorias que alimentan el alma y sus sueños, que la han llevado a ser reconocida en el mundo y a que su historia cautivara e inspirara a muchas personas.

El deporte nacional tiene una nueva figura, apenas tiene 26 años de edad, por lo que le espera una larga carrera llen de éxitos.

¡Matétéraba, María! (¡Gracias, María!), por ser una mexicana que trasciende.

¿Qué te pareció la historia de María? A nosotros nos sorprendió gratamente y nos demuestra que en México hay mucho talento no solo en el mundo artesanal también en el deporte, así que no dudemos en apoyarlos.

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